LA SIRENA DE LA CATEDRAL DEL SOCORRO
Camilo Ernesto Espinosa Castellanos reconocido como ‘Patrimonio Viviente’ por transmitir el legado de la tradición oral santandereana, entre mitos, leyendas y refranes populares, en entrevista con el antropólogo Oscar Eduardo Rueda el 23 de junio de 2016 en la residencia de Luis Efraín Duran:
“Me hizo acordar usted ahora que habla de la Semana Santa del mito de la Sirena de la catedral, que hoy día es Basílica… Algunos dicen que debajo de la iglesia alcanza a pasar un brazo del mar, porque el agua que sacan de ahí es agua salada… Donde Usted entra por la entrada de la izquierda, ahí donde está el confesionario, ahí hay un aljibe, quita esas lozas y está el hueco del aljibe. Ahí dicen que hay una Sirena que es la que cuida que no se roben las vigas de oro ¿Cuáles son las vigas de oro? Se dice que en donde está ahora la catedral había una laguna encantada que era una laguna sagrada de los indígenas, y cuando llegaron los españoles acá ellos lo que hicieron fue echar todos sus elementos de oro ahí, y que había una planta que derretía el oro, sí, entonces que le echan eso, que hacen su ritual, que ponen sus plantas y se formaron dos columnas; dos columnas de oro enterradas en lo que era la laguna, porque la laguna se secó. Por debajo se formó lo que es el transito del mar, y se dice que ahí hay una Sirena; y que esa Sirena se escuchaba llorar en Semana Santa a las tres de la tarde […] Y dicen que hay gente que ha ido a buscar las columnas de oro y la misión de la Sirena es cogerlos y ahogarlos ahí.”.
Luis Felipe Cruz Moreno (Guía turístico del Socorro y residente del municipio desde hace 5 años) en entrevista con Oscar Eduardo Rueda y María Fernanda Pacheco, el 17 de Septiembre durante un recorrido por el Socorro:
“En la Catedral existen varios mitos […] Se dice que a las 12 de la noche se escucha una Sirena llorar, ya que por la parte superior de la Catedral se escucha como agua; entonces se dice que allí llega uno de los brazos del mar y que allí en la parte de abajo (subterránea) hay una Sirena la cual llora todos los días a las 12 de la noche”
Socorro Pradilla Ruiz en entrevista con Luis Antonio Caballero Villamizar, el 02 de Noviembre: Bueno que yo sepa, que yo me haya dado cuenta, eso fue hace muchos años, estaba joven en la catedral hay un baldosa que en ese entonces la levantaban y usted por ejemplo levantaba esa baldosa y usted ponía el oído y usted escuchaba bien cantar la sirena o a veces llorar, pero eso si es realidad porque mucha gente la sentía y ahí inclusive ahí en eso sacaban agua eh a veces ponían baldes con un laso tiraban sacaban agua y de todo y eso cuando lloraban más, porque tal vez se asustaba a que le quitaran el agua, eso es porque la catedral está construida en el gajo del mar y eso por debajo se sentía bastante ruido el zumbido del mar y hay cantaban las sirenas y eso yo creo que es realidad eso lo sabe mucha gente es más habían tiempo en que se salía el agua eso hubo gente que vino de por allá lejos trajeron un montón de aparatos y maquinarias para sacar agua y todo, pero eso ya hace muchos años cuando yo era joven y eso taparon que porque era un peligro para la gente, pero que eso hay se siente llorar la sirena y a veces cantar y eso es realidad porque se siente el zumbido porque usted se agacha y se sentía bien el ruido del mar bien, bien, esos son cosas que han sucedido que en unos tiempos; esas cosas a la hora de la verdad uno no le paraba bolas, pero son cosas reales.
Don José Galindo en entrevista con Luis Antonio Caballero Villamizar, el 08 de Noviembre:
Se cuenta que debajo de la Catedral del Socorro pasa una parte subterránea del mar o brazo del mar, que dicen con fuerte oleaje; y que se escucha en Semana Santa, del viernes santo a las 3 de la tarde se oye unos lamentos melancólicos de una sirena por la muerte de Jesucristo. Esa es la historia.
Rosa Castillo en entrevista con Luis Antonio Caballero Villamizar, el 16 de Noviembre:
“Nosotros, cuando llegábamos allá, cuando uno estaba pequeñito, eso del susto yo me perdí y subí; me subieron al piso de encima, me tuvieron allá escondida hasta que, después, me estaba buscando mi mama y mi papa. Yo me perdí del susto que ahí asustaban, entonces, estábamos eso de encima, y que eso era una laguna, y que sí, y de verdad, en la tarde de noche se oía como cuando uno se pone un caracol así en el oído, y se pone el caracol ese grande, y que usted siente; eso sí es verdad. Antiguamente la gente sacaba agua de la giba, la giba era como por el lado donde están los santos, que están ahora; así por la entrada, por donde entran por la casa cural y por el lado de acá, donde están todos los santos. Para ir por donde unos sacaba el agua – Mucha gente habla de La Sirena? – Claro mucha gente del Socorro, muchísima. Yo tengo 68 años y mucha, que mi mama también decía lo mismo y mi papa también decían eso, nos sacaban de ahí cuando iban a sacar agua.”.